Ninguna parte.

Días largos, muy largos..y lo único que se me ocurre es perderme entre los árboles y respirar ese aire que no dice nada y a la misma vez lo dice todo.-Esto es libertad, y sentirse bien-pensé. Aunque esto no duraría para siempre,traté de no perderme ni un segundo de aquel instante que pasaba lento, muy lento...y esto, se lo agradecía al mundo. Esa lentitud me hacía sentirme viva a pesar de que tubiera los ojos cerrados y estubiera acostada sobre el cesped, pareciendo un ser inerte con ganas de no volver a vivir. Si, me sentía como en un cuento, lo típico, el sol me daba en la cara y me cegaba, los pájaros pasaban casualmente por encima de mi cabeza, hacía un día claro, las nubes sobrevolaban mi cabeza...y yo, yo no tenía problemas...Cruel destino, ¿porque hiciste que el único nubarrón negro que había en el cielo pasara justo sobre mí, haciendome olvidar todo aquello que me hacía sentir tan bien?